El servicio marítimo admite ante el juez que ignora el horario, tiempo y lugares por los que navegó el velero que salió de Valencia
La polémica por el barco abortista que atracó en Valencia en octubre de 2008 lejos de apagarse se mantiene viva. La querella que presentó el partido Alternativa Española contra el ginecólogo José Luis Carbonell sigue sus pasos en el juzgado de instrucción número 18 de Valencia.
La acusación pidió pruebas que demostraran que el personal de la embarcación interrumpió los cuatro embarazos -uno de ellos de una menor- cuando navegaban en aguas internacionales.
Por el momento, la Guardia Civil desconoce los movimientos de la embarcación, tal y como ha reconocido en su respuesta al juzgado. Así, en el oficio al que ha tenido acceso LAS PROVINCIAS, el servicio marítimo admite que sólo tiene constancia de la siguiente información: «La embarcación salió de puerto a navegar sobre las 11 horas del día 20 de octubre, desconociéndose horario y tiempo que la misma navegó tanto dentro como fuera de las aguas de soberanía española».
Por tanto, la Comandancia confirma ahora lo que se sospechó desde un principio. La Guardia Civil no siguió al barco para comprobar que, efectivamente llegaba hasta las aguas internacionales. En el caso de la costa valenciana, por su especial ubicación geográfica, este límite se encuentra a unas 17 millas.
Además, la fecha del 20 de octubre -la única sobre la que aportan datos- corresponde al día en que se practicó un aborto farmacológico a una menor de 18 años sin el consentimiento de sus padres, una condición que exige la legislación española, pero no la holandesa.
En el oficio remitido al juzgado no se proporciona información sobre los movimientos de la embarcación en jornadas anteriores, cuando se practicaron tres abortos en la embarcación Menina. La campaña fue impulsada por la oenegé holandesa Women on Waves (Mujeres sobre las olas). Algunas fuentes especularon que el Gobierno alentó esta iniciativa como primer paso para abrir el debate sobre la ley del aborto.
La clave del asunto consiste en averiguar dónde se practicaron los abortos. En aguas internacionales rige la legislación de la bandera bajo la que navega la embarcación, en este caso, la holandesa. Esta permite que embarazadas de menos de siete semanas interrumpan su embarazo. Pero en España está prohibido sin la autorización de un profesional médico.
La Guardia Civil confirmó, además, que el barco pertenece a una ciudadana holandesa, Myra Driessen, con domicilio en Amsterdam. La embarcación permaneció dos meses atracada en la Marina Real Juan Carlos I, desde el 26 de agosto al 26 de octubre.
www.lasprovincias.es/valencia/20090906/valenciana/guardia-civil-desconoce-barco-20090906.html